Si alguna vez ha visto una paleta de colores, sabrá que elegir el color adecuado para cualquier habitación es, en realidad, todo un reto y a veces puede resultar un poco abrumador. Al cabo de un rato, se deja de ver la diferencia entre colores y las pequeñas diferencias entre tonos empiezan a ponerte de los nervios, pero no es sólo tu indecisión lo que hace que sea casi imposible elegir. Por eso te traemos una sencilla guía sobre cómo elegir el color ideal para cualquier estancia. Te contamos qué colores son ideales para las habitaciones infantiles, por ejemplo, y cuáles para la cocina o el baño.
Un color para cada estado de ánimo
Empecemos desde el principio. ¿Cómo es posible que cada color tenga un efecto completamente distinto en nosotros? Probablemente todos estemos familiarizados con las típicas etiquetas: el rojo es agresivo, el azul es relajante y el naranja enérgico; pero las asociaciones que formamos pueden tener orígenes distintos. ¿Todavía no ha decidido de qué color pintar su casa? Adam le enviará un pintor contrastado que estará encantado de ayudarle.
Algunas de nuestras asociaciones están determinadas genéticamente. La Madre Naturaleza siempre está pendiente de nosotros y ha ideado varias formas de advertirnos de lo que podría ser perjudicial para nuestra salud. Piense en el color rojo intenso de un sapo: grita a los cuatro vientos que es venenoso. Podríamos citar cientos de ejemplos. Para algunos colores, simplemente tenemos una afinidad natural con sus propiedades.
Sin embargo, otros significados los aprendemos por nuestra cuenta a lo largo de la vida. Algunos los recogemos de la sociedad, que naturalmente se ajusta a las tendencias. Por ejemplo, ¿sabía que antes el azul era el color de las chicas? Estas asociaciones pueden cambiar con el tiempo. También asociamos los colores a distintas experiencias y recuerdos. Por ejemplo, si dormía bajo una manta rosa en casa de su abuela durante las vacaciones, el rosa siempre significará para usted vacaciones, tranquilidad y alegría.
¿Qué factores que influyen en nuestra selección?
Dejando a un lado todos los factores psicológicos antes mencionados que conforman nuestra relación con los colores, la propia elección de los colores de interior está más influida por factores físicos. En general, los colores pueden dividirse en cálidos y fríos. Los cálidos siempre nos hacen sentir arropados y alegres, evocando emociones en nosotros. Por eso son adecuados para estancias sociales, como salones, cocinas e incluso habitaciones infantiles. Los colores fríos, por el contrario, tienden a calmarnos y son adecuados para estancias en las que queremos relajarnos, descansar o simplemente concentrarnos en nosotros mismos, es decir, dormitorios, cuartos de baño e incluso el despacho de trabajo.
Otro factor a tener en cuenta a la hora de elegir el color ideal es lo claro o intenso que queramos que sea. Esto se basa en la distribución de la habitación que queremos pintar. Si se trata de una habitación pequeña, utilizaremos colores claros que iluminen todo el espacio haciéndolo parecer más espacioso. Sin embargo, ya hemos escrito sobre otras formas de ampliar visualmente una habitación pequeña. Pero, en general, los colores neutros y claros son atemporales y combinarán bien con muebles multicolores. Sin embargo, siempre es mejor que elijas el color de las paredes en último lugar, después de haber elegido los muebles. Así armonizará todo el interior y no acabará eligiendo un color de sofá que no combine con las paredes.
¿Qué significan los distintos colores?
Si sigues teniendo dudas sobre cuál es el color adecuado, hablemos de cada color por separado. Quizá te sirva de guía y por fin puedas elegir el adecuado para tu habitación.
La trinidad dorada del gris, el negro y el blanco son los colores fundamentales, que suelen combinarse con otros colores. El blanco, sin embargo, es una excepción, de la que hablaremos en detalle más adelante. Por supuesto, siempre utilizamos el gris y el negro en combinación, pero ¡cuidado con el negro! Elígelo con sensatez, porque reduce ópticamente el espacio de forma considerable.
El azul es un buen color, y no es diferente cuando se trata de elegir el color adecuado para pintar. Si eliges una versión más clara, es el color de la calma, que conduce a la productividad. Por eso es adecuado para el cuarto de baño o el estudio. Sin embargo, ten cuidado con el azul oscuro, ya que puede crear cierta tensión. El azul real, en cambio, puede considerarse un signo de lujo.
Paleta de colores azul brillante y amarillo
El morado es un caso similar. Suele considerarse un color lujoso e incluso extravagante. El morado oscuro es muy representativo y encaja bien en espacios sociales. Por otro lado, el lavanda es adecuado para la relajación. No puede equivocarse pintando de lavanda un dormitorio, por ejemplo. Otro color calmante que conduce a la productividad es el verde. Es el color de la naturaleza y tiene un efecto relajante. El verde también indica nuevos comienzos. Por eso es excelente para el dormitorio o la oficina.
Los colores más populares en los últimos años son el amarillo y el naranja. Ambos son muy energéticos, sociables y nos dan una sensación de calidez. El amarillo también es fantástico porque amplía visualmente e ilumina cualquier espacio. Puedes pintar de amarillo y naranja el salón, la cocina, la habitación de los niños o incluso el comedor.
Para el dormitorio de una niña, el rosa es una elección natural. Pero no tengas miedo de utilizarlo en tu propio dormitorio, por ejemplo. Este color del amor puede calmarte después de un día de trabajo.
El único color con el que hay que tener cuidado es el rojo. Además de ser el color del poder, también es el color de la agresividad. Por lo tanto, utilízalo sólo en pequeñas cantidades, por ejemplo en el salón o en un espacio donde parecerá desvanecerse.
No hay blanco como el blanco
El blanco es el color más versátil, por eso la mayoría de nosotros confiamos en él para dar a nuestras habitaciones un aspecto fresco y limpio. Sin embargo, es posible que después de simplemente pintarlo de blanco, se haya encontrado con que no es EL blanco que imaginaba. Sin embargo, no eres realmente capaz de decir qué es lo que no te gusta de él. Sólo sabes que no es el color adecuado. Elegir el blanco adecuado no es tan fácil. Si vas a una tienda de pinturas, verás que la pintura blanca puede tener muchos extras según el pigmento: estándar, plus, bonus, polar o pro. La pintura estándar tiene poco pigmento blanco, por eso se utiliza en interiores técnicos como un sótano o un garaje. Los tonos como snow scene o silk breeze ofrecen los resultados de mayor calidad. Tienen un aspecto muy limpio y aportan más luminosidad.
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